13.5.13

El Arte rompe las barreras

Desde muy pequeña tengo el convencimiento de que el Arte es el "Gran Instrumento", el que sirve a la humanidad para perfeccionarnos, para acercarnos a la verdad propia, que ayuda a su vez a otras personas a acercarse a su realidad interna.

Pero, definir qué es el Arte es complejo, me ha costado años de reflexión acercarme a ello, aún sigo sin encontrar modo alguno para hacerlo de modo objetivo, sinceramente, incluso dudo de que pueda existir objetividad en el Planeta, menos pues en lo que al Arte se refiere. 

El Arte, las Artes!!!!!, insuflan vida en los cuerpos más desvalidos, en las almas más necesitadas y en los espíritus más vacíos. Considero Arte toda manifestación realizada por las Personas que conmueven el corazón de alguna otra. La Medicina es un Arte, el Teatro es un Arte... Ahora bien, cuando yo hablo de ellas, de las Artes, me refiero sobre todo a las experiencias de comunicación a través de medios alternativos al habla, y sobre todo cuando sueño con el Arte, cuando lo visualizo despierta, veo y siento la Danza, el cuerpo en pleno movimiento; siento el Teatro, el poder de la expresión de la palabra no dicha; siento la Música, el vibrar de las ondas en mi cuerpo. 

Arte es aquello que uno hace y transforma al otro-a sin mayor intención que la de mejorar su vida. 

Me dan bastante igual los debates sobre conceptos, desde luego me los planteo, pero sinceramente, ¡Qué me importa a mí las divagaciones conceptuales de otros, lo que yo hago aquí es para mí y para quienes quieran leerme, no para que el mundo me apruebe una teoría!

Volviendo al tema en cuestión, desde que tengo memoria he usado baile, música, pintura, teatro... como medios de expresión, como mi manera de comunicarme con el Mundo, e incluso conmigo misma. En ocasiones no he sabido como decir "hasta aquí llegué", y entonces recurría a alguna canción que transmitía casi exactamente lo que yo quería decir, entonces la cantaba, y en ese momento añadía yo con mi tonalidad el verdadero mensaje de mi alma. Me recuerdo destrozada, llorando ante el que fue el amor de mi vida, cantándole un "ya, para ti no estoy". Me recuerdo también feliz, enviando a mis amigas una foto hermosa, llena de vitalidad y amor, para decirles sin palabras cuánto las aprecio. 

Podemos crear nuestro lenguaje, o podemos usar lo creado para comunicarnos. Somos libres de expresarnos como queramos. Recuerdo por si alguien lo olvidó: la libertad reside en las personas, no nos es dada, por tanto, no puede ser quitada. 

Uno de mis sueños es crear un Proyecto en el que el Arte sea la herramienta de crecimiento personal, donde el Teatro, la Danza, la Música y los Audiovisuales sean los elementos que nos permitan generar un cambio interno y a su vez aquello que nos comunique verdaderamente con aquellos otros que experimentan nuestra expresión. 


Este año tuve la fortuna de contar con una Directora de Teatro Experimental, Ana Buler, una joven polaca que hace un "mix" entre Grotowski, Stanivslaski y otros tantos que de momento no soy capaz, no ya de pronunciar, sino ni siquiera, de escribir.  Con ella sentí que el Arte era mucho más de lo experimentado en los 26 años anteriores. La riqueza de técnicas, y su disposición a la experimentación desde la profundidad del Ser, nos llevó a momentos muy interesantes de desarrollo personal, momentos en los que la superación de las propias barreras fueron fundamentales para poder continuar con el trabajo del grupo. La valentía y la confianza en una mejora y aprendizaje constantes fueron fundamentales para mí a la hora de participar. Más que un taller de teatro se convirtió en encuentros para el desarrollo de la sabiduría interna. 



Existen infinidad de movimientos sociales que tienen como herramientas básicas diferentes ramas artísticas. Como herramienta educativa fundamental en mi proceso de desarrollo personal y profesional he usado el juego teatral y las artes plásticas. Jamás he dejado de "echar mano" de la poesía, ni tampoco de la música. 
A medida que voy conociendo más proyectos, me voy sintiendo más y más convencida de que mi línea de actuación, por más miedo y dudas que me asalten, es la creación artística.  Hoy, sin ir más lejos, he encontrado un maravilloso ejemplo más que refuerza mi interés en el Arte como herramienta de cambio personal y social, como soporte del desarrollo y la educación comunitaria, .... Este proyecto que tanto ha cautivado mi atención se llama Las Madres pueden cambiar el Mundo. Está financiado con la colaboración de la Fundación Playing for the Change (Tocando por el Cambio!!. A grandes rasgos; se trata de un grupo de mujeres de Nepal que se han organizado para sensibilizar a la población femenina nepalí principalmente, respecto de sus derechos fundamentales respecto al tráfico de mujeres, la prostitución y la droga. Hacen uso del teatro y la música para acercarse a las comunidades más remotas del país, les informan de las consecuencias ignoradas de sus actos - trato respecto a las mujeres de sus propias comunidades y les facilitan información sobre sus derechos. 

Puedes ver el video a continuación e incluso colaborar con una donación en el siguiente enlace: 


Sitio Original del Vídeo : http://vimeo.com/65602618


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