6.11.17

Julia Cameron



El Camino del Artista, obra de Julia Cameron, fue uno de esos libros que marcó un antes y un después en mi vida, me costó encontrarlo impreso, recorrí librerías de diferentes ciudades y no aparecía, hasta que una causalidad hizo que cayera en mis manos, así que dejé de leerlo en inglés a través del ordenador y pasé a tenerlo en mis manos en castellano. 

Años más tarde me enteré de que había un Camino del Artista para padres, una guía para conectar con nuestra creatividad a la par que mostramos el camino para desarrollar la de nuestros hijos/as, y esta vez fue sencillo, llegó a mis manos en el momento adecuado de nuevo, cuando andaba necesitada de un compañero de viaje silencioso, algo que me ayudase a estar conmigo misma sin necesidad de hacer grandes gastos, ni salir de mi casa. Y aquí lo tengo, a mi vera, ayudándome a tomar conciencia sobre mi misma, mis bloqueos, mi fuente de energía, ... guiándome a través de sencillos ejercicios a estar presente y a crear mi día a día desde el corazón.

Y como no, lo recomiendo, RECOMIENDO, con letras mayúsculas, tanto el primero, como el segundo, ambos libros son herramientas muy útiles en la vida de cualquier persona que desee vivir más su propio camino, crearlo, amarlo. 


4.11.17

Maternando

Se acercan los dos años y medio, a eso le sumo nueve meses de embarazo, es mucho tiempo, o poco, según se mire; para mí, lo suficiente para afirmar que la maternidad es una oportunidad de cambio radical, de re-conexión con la esencia de una misma. Suficiente para ver que de una depende la vida, la propia y la ajena, la de ese ser en paz que ha venido a alumbrarnos con su luz y a poner con ello en evidencia lo que antes en nosotras era "la sombra", lo que ocultábamos consciente o inconscientemente en la oscuridad de nuestro ser, lo inacabado, lo no aceptado, lo negado... y también, como no, luz sobre nuestros dones, nuestras pasiones, nuestros anhelos escondidos. 

Maternidad, o maternidades, cada ser la vive a su manera, con sus propios condicionantes internos y externos, superando los retos o dejándose aplastar por las circunstancias. Tomando las riendas de su vida o abandonándose a la inercia. Tomando decisiones conscientes o inconscientes, o quizás dejando que sean otras personas (instituciones...la sociedad), quien marque su camino. 

Hay quien lo vive como una lucha, personal o social, quien ve ser madre como un encarcelamiento voluntario a cadena perpetua, otras lo viven como una bendición. Yo, yo lo vivo como una oportunidad de crecer, de sanar heridas, de expansión, de ser yo misma, de entrega, de aprender haciendo, de crecimiento constante, de desaprendizaje. 

Cada una de mis elecciones anteriores me ha llevado al lugar en el que me encuentro ahora, el camino no ha sido sencillo, más bien ha sido duro, porque mi hija llegó en el momento necesario para darme cuenta de que todo lo que yo había sido, lo que había hecho... y lo que había dejado de hacer, me llevaba contra los muros, a tropezar una y otra vez contra las mismas piedras. 

Y en esas ando, viajando hacia adentro, mis adentros, acompañada por un bello ser que me recuerda que el momento es AHORA, que mis maneras de hacer eran del pasado y que poco servían para el futuro. Y aquí, ahora, soy, estoy, aprendo y desaprendo. 



24.9.17

Yoga infantil

Les presento el cartel de Yoga Infantil, un proyecto muy lindo llevado a cabo por una hermosa persona.

Se formarán grupos a partir de 3 años de edad, aunque ya varias madres con hijas/os  le estamos animando para abrir un grupo de mamis/papis, y peques de menor edad.




5.8.17

Dos vueltas al sol


A mi hija;

Juntas, así es como hemos estado estos dos años, inseparables. Me sentí profundamente apegada a ti, tenía miedo de dejarte bajo la responsabilidad de otra persona, temía que te pasase algo. Proyecté todos mis miedos sobre tu pequeño (gran) ser. Los demás lo hacían todo mal, nadie sabía atenderte como merecías... así eran las cosas en mí. Dominada por el miedo.

Poco a poco he ido acallando las voces internas, el ruido. Poco a poco he ido serenándome y confiando. Poco a poco, gracias a la experiencia, he aprendido a identificar mis miedos y a separarlos de tu ser. Esto es mío, me pertenece y es a mí a quien toca solucionarlo. También he aprendido a diferenciar entre el miedo que me ayuda a situarnos en un lugar seguro, y el miedo que me limita y te limita crecer.

Aprendizajes, dos años de profundos, intensos, y algunos dolorosos aprendizajes. Hace poco leía que el cambio no duele, que lo que duele es aferrarse a lo que nos limita. Soltar trae paz, calma, amor, claridad, energía, y es símbolo de valor, de coraje, de amor propio incluso.

Y aquí estoy, a tu lado, siempre acompañándote, aún cuando no me ves, unidas por el lazo de amor más fuerte que jamás haya podido imaginar. Aquí estoy, observándonos, aprendiendo, creciendo juntas, segura de que todo lo que hago es lo mejor que se hacer en este momento, y que seguiré mejorando a cada paso.

Agradecida por tu existencia. Profundamente agradecida por los aprendizajes.



5.2.17

Crianza...

Fuente: Internet

Crianza Natural, Crianza Respetuosa.... Hace pocos días una amiga me reenviaba un artículo sobre la "Moda de la Crianza Natural", no tengo el enlace por lo que no puedo redireccionarles (lo siento, pero lo perdí), en él se comentaba que circula entre la población adherida a ésta moda una fe ciega  en los resultados positivos que la fórmula "colecho-porteo-amamantar" procura sobre quienes la practican, en la relación sana entre progenitores e hijos/as y en el desarrollo sano a nivel emocional, mental y físico de las y los bebés. Aseguraba que muchísimas familias adoptaban tal fórmula para lograr unos hijos/as cuyos futuros serían sí o sí,  de adultos sanos emocionalmente, autónomos...etc.

Desde antes de ser madre tuve innumerables ocasiones de escuchar testimonios de familias creyentes en ésta fórmula, mamar-dormir juntos-llevar en portabebés. Yo misma me sumé al movimiento mamá canguro-coclecho a toda costa, pero una vez me encontré con la realidad; sentí, experimenté y, me expresé y comencé a escuchar otro tipo de testimonios, más sinceros y profundos sobre la realidad de dicha moda, así como de las consecuencias de seguirla a raja tabla; cambié, dejé la creencia fija y me flexibilicé.

Madres estresadas, agotadas, incluso lesionadas por portear a sus hijos/as a todas horas desde el nacimiento; parejas rotas por la obsesión de la madre de dormir a solas con el bebé y no dedicar tiempo ni a sí misma ni a su pareja; mujeres heridas porque consideraban que había que dar de mamar a cualquier precio. Llantos, depresiones por la culpabilidad de no poder amamantar, o de seguir amamantando cuando ni física ni emocionalmente podían más.

Cuando llevamos al extremo cualquier creencia, por mucho que nos duela, solemos caer en el error. Mi experiencia me dice que el colecho es maravilloso, pero agota, sobre todo si hay un bebé que mama unas 10 veces por noche aún con 10 meses... 14 meses... (por suerte no ha sido nuestro caso). También aprendí que portear está genial, pero que no sirve de nada si lo hago como una creencia y no desde el deseo, desde la apertura, desde el corazón y desde el respeto hacia mí misma. Colgarme a mi hija en la mochila un día de agotamiento y mal humor puede ser motivo de cambio de ese estado gracias a la cercanía con la niña, sentir sus manos acariciando mi pecho, mis brazos..., olerla... o, al contrario, en lugar de mejorar puede desencadenar en rechazo hacia la pequeña y culpabilidad por tal rechazo. Entre otras muchas posibilidades.

Yo dejé de portear hacia los 15 meses, aunque me era más práctrico para según qué salidas, acababa con dolor de espalda y vértigos. También está ahora en su cama, en su propia habitación; a pesar de que antes de nacer me dije y verbalicé que estaría con nosotros en la cama hasta que ella saliese de la misma por su propio pie (había leído y escuchado que se suele dar sobre los dos años o más adelante). Y en realidad ella había empezado a demandar un espacio para dormir sola, a ratos se iba a su sillón cuna y pedía dormir sola por pequeñísimos instantes. Así que aproveché la disposición y adecuamos en su habitación una cama segura, cómoda y a la que ella puede acceder cuando le apetezca sin ayuda.

Amamantar. Uff... ¡cuánto dilema!. Mi experiencia es que entre más energía ponemos sobre el asunto, peor se pasa. Es decir, creo que lo primero que hay que hacer es preguntarnos ¿cómo me siento al dar de mamar?. Si la respuesta es que ya no puedes más, busca tu estrategia, la adecuada para tu caso, respetando a tu hijo/a para dejar el pecho. Si la respuesta es estoy agotada, pero quiero seguir porque sé que mamar es saludable física y emocionalmente para mi hija/o, pues también, busca tu estrategia, la manera en la que puedas dedicarte más a tí sin dejar de dar el pecho. Y si no tienes claro si quieres o puedes seguir adelante, siempre puedes buscar ayuda externa, como una Doula, una Matrona, un Grupo de Lactancia... y o compartir tu experiencia con otras madres para llegar poco a poco a esa respuesta que tienes en tí pero que no alcanzas a ver en este momento. 

En mi caso... yo estaba agotada, al borde de la desesperación. Sin dormir bien por las noches, siempre menos de 3 horas seguidas desde antes de nacer la niña, rendida por la cantidad de horas que se quedaba pegada al pecho mamando (no pegada sin mamar... no, mamando), y por el día pegada dos horas seguidas, a veces más (cuando eran más siestas pues... más teta).  Mi solución fue cambiarla a su cama, además de darle más actividad física, veo que lo de la actividad física es fundamental en nuestro caso. También cantarle le ayuda a dormirse antes, así que entre más canto menos teta. Ahora mismo parece estar en una etapa de desapego (yo lo llamo así), quiere más canto, más cuentos, cosquillas y menos teta. Y yo agradecida, porque me canso menos.

De cualquier modo, me di cuenta de que tomaba menos tiempo el pecho cuando más cansada estaba, pues el agotamiento la llevaba a caer rápidamente en el sueño. Sin embargo, las tardes o días que no tenía mucho movimiento se pegaba más al pecho. Desde mi limitado conocimiento, creo entender que cogía tanto pecho no por hambre, sino porque no lograba quedarse dormida. Así al menos sigue siendo. Mucha actividad física, menos teta, más sueño profundo. Poca actividad física, más pecho para dormir, más despertares nocturnos, por lo tanto menos tiempo para mí, más desgaste físico y más agotamiento. Y bueno, en mi caso, es cierto que me ayuda a mantener el pecho cuando siento que en procesos gripales, catarrales, etc., tomar el pecho le proporciona calma, alivio y mejoría. Nada más por esos ojos rojos reflejando alivio en las tomas de madrugada cuando ha estado mala me hacen sentir que lo mejor que puedo hacer por ella en esos momentos es darle sin medida lo que más le place, mi pecho.

Y sí, hay tantas situaciones como niños/as. No existe el copia y pega, ni la fórmula correcta. Cada cual ha de hacer según su sentir, sus circunstancias. Ahora bien, yo creo que como madres y padres, como adultos que somos, que hemos decidido traer al mundo a un Ser; es un acto de responsabilidad hacer lo que este en nuestra mano y aprender (informarnos, formarnos, cuestionarnos...reinvertarnos incluso) para darnos y dar lo mejor de nosotros. Sin juicios, sin culpas pero siendo conscientes de que gran parte del proceso de maternidad/paternidad responde a patrones aprendidos e insconscientes, por ello cuestionarnos lo que hacemos, reflexionar, observarnos, permitirnos y soltar, soltar mucho para dejar ser, para que emerja el yo sano y logremos disfrutar de cada instante. El proceso es intenso, incluso a veces denso, pero es así, sin más, para que haya luz ha de haber oscuridad, y viceversa. 

Gracias por compartir este rato de lectura. Me place escribir, es catártico para mí, y me place saberte leyéndo. Un abrazo y Feliz maternidad, paternidad... :) 




28.1.17

Bosquescuela



¿Habías escuchado algo anteriormente sobre la Metodología Bosquescuela?

Ahora mismo tengo poco tiempo para escribir, por lo que te dejo un enlace para que indagues más y descubras por tí misma/o; Bosquescuela. 

Y si te gusta lo que has leído... quizás también pueda interesarte la formación que imparten, la verás en la página anterior, pero también aprovecho y te la facilito aquí.

Para quienes estamos en Canarias!!!! Vuelven a impartir el Taller de iniciación en Fuerteventura!!!!


Y la Formación Completa!!!! En Donosti! ¿Vamos?


Cuentos por la diversidad

¡Cuántas ganas tenía de poder contarlo! Hace tiempo que comencé a magullar una idea, llevo meses buscando entre libros y en los archivos de ...