26.9.10

De pronto

Vivir bien, vivir alegre, ViVir es un acto consciente. Supone observación del propio interior, del exterior desde fuera y desde dentro. Vivir supone estar atenta, atento.

Ando sola, con mi mochila como única compañía. Ando observándome y observando. 

A veces creo que el lugar al que llegué es ese lugar en el que estaré establecida un tiempo. De pronto, dejo de prestar tanta atención y me sumerjo en un mar de ilusiones e ideas a desarrollar en mis próximas semanas. 

De pronto, algo me recuerda que he dejado de observarme, de sentir de veras lo que está pasando. 

A veces llego a un lugar simplemente para aprender que ya no quiero estar en sitios como ese. Entonces, cuando me doy cuenta de que he dejado de observarme

algo pasa, 

                             y De pronto, 

ya no puedo evitar seguir mi rumbo. 

Una vez sé que se acabó mi tiempo en tal o cual lugar, 

                                                   ya no hay marcha atrás, ya no puedo negarlo, ya no puedo parar. 

Y, así es, como ando de un lugar a otro, sin rumbo marcado. 
                                                     Me guían mis sentidos, mi intución, mi Espítitu. 

Unos dirán que Dios, otros que la Gracia, otros que Buda, o El Gran Espíritu. 

             Solo sé que todos esos nombres son Uno, y ese Uno es quien está en mí y me lleva
de su mano, anda ante mi, sobre mí, a mis espaldas, bajo mis pies. Anda conmigo, en mí. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si te apetece puedes dejar aquí tus comentarios. Gracias.

Cuentos por la diversidad

¡Cuántas ganas tenía de poder contarlo! Hace tiempo que comencé a magullar una idea, llevo meses buscando entre libros y en los archivos de ...